Jugar no es solo cosa de niños. El juego está presente en todas las etapas de la vida, y sus beneficios se extienden a todas las edades. Dado que envejecer no es sinónimo de perder la vitalidad, una de las mejores opciones para conservarla es precisamente esa: el juego.

Las actividades de entretenimiento para personas mayores reportan numerosos beneficios a todos los niveles: físico, mental, emocional y social. En este artículo abordaremos la relevancia del ejercicio en la tercera edad y el mantenimiento de la mente activa, y os ofreceremos una pequeña guía de cinco juegos o actividades para disfrutar con familia y amigos este verano.

 

Importancia del ejercicio y mantener la mente activa en la tercera edad

Expertos y profesionales sanitarios inciden en la importancia de llevar una vida activa y saludable durante todas las etapas vitales, ya que está asociado con múltiples beneficios para la salud de las personas, independientemente de su edad. Así, es importante mantener una rutina diaria de ejercicio físico, que influye significativamente en la prevención de múltiples enfermedades y patologías, así como en la calidad y en la esperanza de vida de la población.

Además, hay que tener en cuenta que la inactividad física constituye uno de los principales factores de mortalidad prematura en países desarrollados, siendo esta característica la responsable de alrededor de 1 millón de muertes al año en la región europea de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Asimismo, la actividad física también implica una serie de beneficios para la población:

• Mejora la conciliación del sueño y el bienestar mental y emocional.
• Reduce los síntomas de ansiedad y depresión.
• Disminuye el riesgo de depresión.
• Contribuye a mejorar la función cognitiva.
• Reduce el riesgo de deterioro cognitivo.

 

La neurociencia ha demostrado en las últimas décadas que la actividad mental continuada y los nuevos aprendizajes se traducen en una mejora de las capacidades cognitivas de nuestros mayores.

En este sentido, hay que tener muy presente que la estimulación cognitiva juega un papel determinante a la hora de mejorar la memoria de las personas mayores. Este tipo de estimulación cognitiva se fomenta especialmente en las residencias de mayores, a través de diferentes proyectos y actividades desarrolladas por los profesionales sociosanitarios.

Cinco actividades de entretenimiento para personas mayores

Teniendo en cuenta todo lo anterior, estas son algunas ideas de actividades lúdicas para llevar a cabo en la tercera edad y ayudarles a pasar un rato entretenido en familia o con amigos. Estos cinco juegos para personas mayores son solo algunas propuestas:

Juegos al aire libre

Las actividades físicas en exteriores contribuyen a un envejecimiento sano y a un ritmo de vida activo. Pueden variar desde juegos en parejas o pequeño grupo, hasta otros por equipos. Desde el clásico juego de la petanca, pasando por juegos sencillos con pelotas, lanzamientos de aros y dardos, hasta otras actividades basadas en la orientación, como el juego de la brújula, o el tradicional escondite, ideal para disfrutar con los más pequeños de la familia.

Juegos de mesa

También podemos proponer otro tipo de actividades con nuestros mayores. Los juegos de mesa siempre son una buena idea. La competencia y el desafío también son útiles para mejorar las estrategias personales, la capacidad cognitiva, la comunicación y la relación con los demás, así como la confianza en uno mismo.

Entre los juegos de mesa clásicos para mayores podemos encontrar el dominó, las cartas, el bingo y el ajedrez, como los más populares. Pero también podemos ofrecerles otras alternativas con juegos que revistan mayor complejidad y duración, como pueden ser: Trivial, Monopoly, Uno o Time’s Up.

Además, es aconsejable que los hijos, nietos y otros familiares tengan la oportunidad de enseñar nuevas formas de jugar y divertirse a los mayores, a través de nuevas propuestas como pueden ser Hombre Lobo, Jenga, Dixit, Unánimo u otros juegos cooperativos y que desarrollen la inteligencia emocional.

Juegos interactivos

Por otro lado, también se recomienda promover actividades lúdicas que fomenten la interacción social, tanto entre residentes y personas de la tercera edad, como de familiares, amigos y personas desconocidas de diferentes edades.

• ¿Quién es quién?: admite muchas variantes y se puede realizar en grupos diversos. Por ejemplo, se puede jugar tapando los ojos a una persona, quien debe adivinar por medio de la voz, quién es la persona que habla o que emite algún sonido.
• ¿Quién es quién? personalizado: poniendo las fotografías de los familiares, residentes o cualquier otro grupo cercano, y así se podrán hacer preguntas más personales y conocer curiosidades que quizás hasta entonces no se habían descubierto.

Para fomentar la interacción también se pueden hacer dinámicas de presentación en grupo, aludiendo a aficiones, ciudades, animales u otro hilo conductor. Y, además, suele ser muy eficaz con las personas mayores jugar a un ‘puzle refranero’: un adulto mayor empieza a decir un refrán y otra persona debe terminarlo, aunque puede ser elegido al azar o no. Esto favorece la memoria y la retrospectiva, la difusión de la costumbre y cultura de los distintos pueblos y regiones de España, entre otras ventajas.

Juegos para ejercitar la memoria

Además de todas las actividades anteriormente indicadas, la capacidad de concentración y el desarrollo cognitivo se pueden desarrollar con algunos juegos de memoria para personas mayores.

Por ejemplo, con los clásicos pasatiempos (crucigramas, sopas de letras, sudokus o autodefinidos), con los que poner a prueba su capacidad cognitiva. Los puzles o rompecabezas son perfectos para cualquier edad, y permiten desarrollar la memoria visual y la motricidad fina.

Igualmente, los acertijos, los juegos de pareja o memotest y “Simón dice” son solo algunos ejemplos para ejercitar la memoria, ya que permiten aplicarse a cualquier temática, se pueden adaptar con diferentes versiones y favorecen la organización de esquemas mentales y la preparación para la acción, así como participar en soportes digitales.

Juegos de estimulación a través de la lectoescritura

La lectura también puede ser considerada como un instrumento muy útil de entretenimiento y entrenamiento mental para nuestros mayores. Ayuda a prevenir el Alzheimer, reduce el riesgo de Parkinson y de otras enfermedades neurodegenerativas o cardiovasculares.

Por todo ello, es conveniente organizar algún tipo de actividad o taller de lectura que estimule a la tercera edad a seguir leyendo (novelas, poesías o audiolibros), para continuar disfrutando de la cultura. Además, se puede proponer que ellos mismos escriban sus propios textos: relatos breves, poesías o capítulos de un libro que alguna vez comenzaron y dejaron en el cajón. O que asistan a cuentacuentos para adultos, sesiones o encuentros con novelistas, poetas o actores.

Del mismo modo, escribir o participar en pequeñas obras de teatro o realizar actuaciones y cambios de rol reporta numerosos beneficios en el desarrollo y para el entretenimiento de las personas mayores.

 

Actividades socioculturales en Amavir

En las Residencias Amavir disponemos de un amplio programa de actividades para personas mayores, de forma que se garantice su bienestar social y emocional, a la par que se favorece el desarrollo de las relaciones sociales.

A través de múltiples actividades socioculturales, se promueve la diversión del adulto mayor, de forma que se deje llevar por su creatividad y que se genere un espacio de complicidad y relaciones interpersonales con los demás residentes para sentirse parte de esta gran familia que formamos en nuestros centros.

Algunos ejemplos de talleres y actividades que llevamos a cabo en las residencias Amavir son:

• Campamentos intergeneracionales. Este proyecto cuenta ya con una larga trayectoria de más de 15 años y suponen una iniciativa pionera a nivel nacional. Estos campamentos juntan durante una semana a residentes y niños y niñas de entre 6 y 12 años, que son nietos o bisnietos de los propios residentes o hijos e hijas de los trabajadores de las residencias. Durante esa semana, se llevan a cabo numerosas actividades de manera conjunta, de tal manera que se convierte en una experiencia muy enriquecedora para ambas generaciones.
• Manualidades: ideales para continuar desarrollando el lado más artístico y creativo de nuestros mayores, o para descubrirlo, en algunos casos, porque nunca es tarde para empezar. En este apartado podemos englobar talleres de pintura, escultura, arcilla y modelado, así como labores de costura. Uno de los ejemplos de este último caso es el proyecto Tejiendo Solidaridad, en el que algunos de nuestros residentes han tenido la ocasión de participar para colaborar y ayudar a personas en situación de vulnerabilidad social.
• Actividades de jardinería y cocina. Este tipo de talleres gozan de gran popularidad y demanda en los centros. Por un lado, el huerto terapéutico anima mucho al adulto mayor a mantenerse activo, a través del cultivo de hortalizas y verduras, teniendo un especial cuidado en su mantenimiento y en el crecimiento de los productos. Ello conlleva, además, una implicación y dedicación para la conservación y el cuidado del medio ambiente especiales, con tareas en las que todos colaboran. Por otro lado, los talleres de cocina son utilizados por los usuarios más experimentados en poner en práctica sus dotes culinarias y en compartirlas con todos sus compañeros, el personal y sus familiares, así como con toda la sociedad, ya que sus recetas suelen compartirse y protagonizar los vídeos de “Así se cocina”, tan virales y visualizados en las redes sociales de Amavir.
• Nuevas tecnologías: Las nuevas tecnologías han llegado a nuestro día a día para quedarse, por ello es importante que nuestros mayores también sepan manejarlas y desenvolverse, por ejemplo, en la realización de una videollamada con sus seres queridos o en el manejo de Internet. El uso de la tecnología en las residencias de mayores tiene múltiples beneficios y en Amavir hacemos uso de diferentes aplicaciones para que nuestros residentes puedan trabajar sus capacidades cognitivas de una manera diferente y entretenida.
• Estimulación cognitiva. Los centros residenciales de Amavir también potencian las capacidades cognitivas a través de programas de estimulación cognitiva, con la finalidad de prevenir posibles demencias. En este aspecto son especialmente destacadas las terapias con animales sesiones en las que se comparte tiempo y cuidados con otros seres vivos y que aportan bienestar al adulto mayor en todos los sentidos, gracias al vínculo afectivo generado con el animal.
• Otras actividades socioculturales: Además de todo lo anterior, desde Amavir fomentamos y garantizamos el acceso a la cultura y el ocio de nuestros mayores, a través de sesiones de cine, visita a exposiciones locales y rutas guiadas a bienes del patrimonio monumental, histórico y artístico, descubriendo la historia y la riqueza del entorno.

En definitiva, estas son solo algunas propuestas que se pueden llevar a cabo para favorecer la diversión y el entretenimiento en la tercera edad, contribuyendo a la participación social, la estimulación cognitiva, el desarrollo integral de la persona y, en definitiva, para garantizar una vida plena de calidad.