La pérdida de la capacidad auditiva es un problema de salud muy común entre la población. Los problemas de audición pueden dificultar la rutina y la vida diaria de las personas: al entender y seguir los consejos de un médico, escuchar los teléfonos, timbres y alarmas, entre otros ejemplos. Además, también puede suponer una barrera para socializar y disfrutar de momentos íntimos con familiares y amigos, lo que puede generar sentimientos de aislamiento. Así, la presbiacusia o pérdida de la audición relacionada con la edad supone una disminución auditiva que ocurre gradualmente con el envejecimiento de la población. Al ser un problema tan frecuente y a su vez tan importante, los gobiernos de cada comunidad autónoma ofrecen ayudas para la discapacidad auditiva.

En cuanto a su incidencia, cabe señalar que más del 5 % de la población mundial (430 millones de personas) padece una pérdida de audición discapacitante y requiere rehabilitación, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Este organismo internacional calcula, además, que en el año 2050 esa cifra superará los 700 millones.

En nuestro país, el 28,5 % de la población española presenta discapacidad auditiva, según la última encuesta de discapacidad, autonomía personal y situaciones de dependencia del Instituto Nacional de Estadística, del año 2020. Los datos del INE también reflejan que este índice aumenta de forma proporcional al incremento de los grupos de edad. Así, la discapacidad auditiva supone un 12,4 % en la población de 6 a 44 años, y asciende a un 21,2 % de los 45 a 64 años. Especialmente notable es el aumento para los mayores de 65 años: según el INE, uno de cada tres españoles de 65 a 79 años tiene discapacidad auditiva. En la franja de edad de 80 o más años, un 38,5 % presenta la misma discapacidad auditiva.

¿Cuándo se considera discapacidad auditiva?

Según la OMS, la pérdida de audición discapacitante es aquella referida a una pérdida superior a 35 decibelios (dB) en el oído que oye mejor. La organización reitera en múltiples publicaciones e investigaciones que la prevalencia de la pérdida auditiva aumenta con la edad: entre los mayores de 60 años, más del 25 % padece una pérdida de audición que provoca una discapacidad a la persona en cuestión. Además, aproximadamente el 80 % de las personas con este problema viven en países de ingresos bajos y medianos. Por este motivo, es considerada una de las principales causas de dependencia en los países desarrollados.

En el análisis de este contexto, la institución internacional también señala que la discapacidad auditiva asociada al envejecimiento es la limitación sensorial más frecuente en las personas mayores. Se asocia con peores indicadores de salud, incluyendo mayor riesgo de fragilidad física y social, de acuerdo con los datos de un informe sobre la pérdida de la audición, la soledad y el aislamiento social del año 2020.

Grados de discapacidad auditiva

El certificado de discapacidad permite avalar la deficiencia auditiva. El reconocimiento del grado de discapacidad se realiza generalmente por los servicios y centros base especializados de las comunidades autónomas. Por ejemplo, en la Comunidad de Madrid, los Centros Base de Valoración y Orientación a personas con discapacidad se encargan de valorar, calificar y reconocer en el ámbito administrativo el grado de discapacidad. También asumen las funciones de información, orientación profesional e intervención terapéutica en régimen ambulatorio. En este documento de la Comunidad de Madrid se pueden consultar los Centros Base para conocer el centro correspondiente por domicilio.

Los beneficios y compensaciones a las que se tiene derecho con este certificado de discapacidad auditiva dependen del grado que se dé en cada caso concreto.

Es importante señalar que la valoración de la discapacidad se realiza desde un enfoque biopsicosocial. Esto implica considerar, además de la patología médica de las personas sordas, cómo afecta la discapacidad reconocida a quien la padece. En la mayoría de los casos será fundamental el diagnóstico de psicólogos y trabajadores sociales.

Asimismo, existe un amplio desarrollo normativo que determina el porcentaje de discapacidad que se concede a condiciones concretas. Por ejemplo, un implante coclear supone la concesión directa de un 33 % de discapacidad, pero una pérdida auditiva unilateral del 70 % requerirá una evaluación de las circunstancias del afectado.

Cómo obtener el certificado de discapacidad auditiva

Del mismo modo que ocurre con otros tipos de discapacidad, los certificados de discapacidad auditiva los expiden las comunidades autónomas, excepto en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, donde lo hace el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso). La solicitud se puede presentar de forma telemática, mediante firma electrónica o bien en los centros base, centros de valoración y orientación u otros organismos, dependiendo de la comunidad autónoma.

El procedimiento suele tener una duración media aproximada de entre 6 y 8 meses para poder obtener el certificado de discapacidad auditiva. Los documentos que hay que incluir en la solicitud son los siguientes:

• Fotocopia y original del DNI del solicitante o su representante legal (o en su defecto, el Libro de Familia).
• Informes médicos, psicológicos y sociales, si se dispone de estos últimos.
• Fotocopia de la resolución de la Comisión de Evaluación de Incapacidades con la invalidez y su grado, si ya la tuviera reconocida.

Una vez presentada la documentación, el solicitante deberá esperar a que se le convoque para el reconocimiento y valoración médica, psicológica y social, que se efectúa en un mismo día. Al cabo de un mes, el interesado recibirá una carta en la que se le comunicará el grado de discapacidad que se le ha otorgado. Es importante tener en cuenta que el grado de discapacidad deberá ser igual o mayor al 33 por ciento para obtener las ventajas sociales y ventajas que otorga el certificado.

A partir de ese momento se abre un periodo de trámite de audiencia, durante el cual el solicitante podrá presentar las alegaciones que considere necesarias. Por último, cumplidos los anteriores trámites, se podrá obtener la resolución definitiva.

¿Qué subvenciones para audífonos hay en 2023?

La Ley de medios de apoyo a la comunicación oral de las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas establece que los poderes públicos contribuirán a financiar la adquisición de apoyos técnicos para personas con esta discapacidad. Así, las subvenciones y ayudas se conceden a los usuarios para adquirir audífonos que no estén contemplados en el sistema sanitario.

Las subvenciones para audífonos proceden de las propias ayudas que establecen las comunidades autónomas y las que otorgan algunas organizaciones y empresas, en colaboración con entidades sin ánimo de lucro.

Así, cada comunidad autónoma tiene sus propios planes de ayuda. En la Comunidad de Madrid, por ejemplo, existen ayudas individuales que gestiona la Dirección General de Atención a Personas con Discapacidad abarcan un amplio abanico. En la convocatoria de 2023, se podrán sufragar ordenadores personales o tabletas (para personas con problemas específicos de comunicación, déficits visuales o auditivos o movilidad reducida), audífonos (a partir de los 27 años incluidos) y piezas para la conservación de implantes cocleares, entre otros dispositivos de ayuda para personas con otro tipo de discapacidad.

El catálogo incluye igualmente elementos para mejorar la accesibilidad en los hogares: instalación y obras de sistema de alarma (indicador luminoso de llamadas o avisadores luminosos de timbre o telefonillo) para la vivienda particular de personas con discapacidad auditiva; camas articuladas (incluido colchón), colchones antiescaras y equipos posturales; elevadores de bañera, sillas especiales de ducha y grúas, así como plataformas o salva-escaleras para la vivienda habitual.

Asimismo, algunas entidades ofrecen un servicio de ayuda social para la compra de audífonos, como el caso de “Ayuda a la audición”.  Esta organización sin ánimo de lucro pone a disposición de los ciudadanos ayudas y subvenciones económicas de 420 euros para adquirir un audífono, y de hasta 840 euros para contribuir con los altos costes de adaptación en caso de necesitar dos audífonos, uno para cada oído.

Del mismo modo, existen ayudas para audífonos a cargo de la ONCE. La convocatoria actual de ayudas individuales para la accesibilidad se abrió el 19 de enero de 2023 y permanecerá disponible hasta el 30 de junio de este año.

Las solicitudes de estas ayudas únicamente se han podido solicitar enviando un email a la Fundación ONCE.

• Al enviar la solicitud y los documentos, automáticamente el usuario recibía una confirmación de recepción de estos.
• La decisión tomada por la Fundación ONCE serán comunicadas por escrito mediante correo postal con acuse de recibo.
• Si su solicitud es atendida favorablemente, es necesario presentar la justificación según se establezca en la comunicación de la resolución.

En este enlace puedes consultar más información sobre ayudas para audífonos y para adquirir otro tipo de productos de apoyo de la Fundación ONCE.

Desde los centros de día y residencias de mayores también se puede obtener asesoramiento en cuanto a la solicitud de este tipo de ayudas.

Requisitos para solicitar la subvención

A la hora de conocer cuáles son los requisitos para solicitar las ayudas para audífonos en la Comunidad de Madrid, es importante tener en cuenta los requisitos principales para ser beneficiario de la Ley de Dependencia, que son:

• Encontrarse en situación de dependencia en alguno de los grados establecidos por la Ley de Dependencia, que irán del grado 1 (dependencia moderada) hasta el grado 3 (gran dependencia).
• Disponer de nacionalidad española.
• Residir legalmente en territorio nacional (al menos cinco años, de los cuales, los dos últimos deberán ser anteriores a la fecha de presentación de la solicitud).
• Ser declarado dependiente por el órgano evaluador de la comunidad autónoma correspondiente a través de cada equipo técnico de evaluación.
• Encontrarse empadronado en la comunidad autónoma donde se solicita.

También es fundamental no tener deudas con la Administración autónoma ni con la Seguridad Social. Por último, es imprescindible presentar la factura de la compra de los audífonos para que se confirme que el importe de la ayuda se ha destinado a la compra de estos dispositivos.

¿Cómo solicitar la subvención?

Los trámites para solicitar el certificado de discapacidad auditiva y la subvención de apoyos para las personas con pérdida de audición son complejos. Los interesados deben ponerse en contacto con su médico de cabecera y solicitar cita previa en Servicios Sociales del ayuntamiento de la localidad, donde residan para que los profesionales de Trabajo Social le informen debidamente y le ofrezcan atención y orientación durante todo el proceso de tramitación.

Este proceso administrativo conlleva, como se ha mencionado anteriormente, una valoración médica, social y psicológica. También se tomará en cuenta el contexto del paciente, su edad y otras consideraciones pertinentes.